El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) ha emitido un nuevo boletín del Sistema Nacional de Asesoramiento sobre Terrorismo (NTAS) advirtiendo de un entorno de amenazas elevadas debido al actual conflicto entre Irán e Israel, en el que EE. UU. mantiene implicaciones estratégicas.
El aviso estará vigente hasta el 22 de septiembre de 2025 y alerta de posibles ciberataques y acciones violentas en territorio estadounidense, especialmente contra objetivos gubernamentales, militares, judíos o proisraelíes.
Ciberamenazas respaldadas por Irán
Según el boletín, hackers vinculados al régimen iraní, así como activistas digitales (hacktivistas) proiraníes, están intensificando sus intentos de atacar infraestructuras digitales poco protegidas. Aunque muchos de estos ataques se limitan a niveles bajos de impacto, la amenaza de incursiones más sofisticadas y disruptivas permanece.
Desde 2020, las autoridades estadounidenses han frustrado varios complots presuntamente orquestados por Irán, incluyendo intentos de asesinato contra funcionarios y disidentes radicados en Estados Unidos.
Riesgo de violencia interna
Además del vector digital, el DHS advierte que la violencia inspirada por el conflicto podría escalar si el liderazgo iraní emitiera un fallo religioso (fatua) llamando a la venganza en suelo estadounidense. Esta posibilidad aumentaría el riesgo de que individuos radicalizados actuaran por cuenta propia contra blancos civiles o institucionales.
En los últimos años, varios ataques terroristas en EE. UU. han estado motivados por sentimientos antisemitas o antiisraelíes. Con el aumento de tensiones entre Israel e Irán, se teme que este patrón se intensifique.
Llamamientos desde organizaciones terroristas extranjeras
El boletín también recoge que grupos como HAMAS, Hezbolá, los hutíes y el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) han difundido mensajes en los que incitan a la violencia contra activos estadounidenses en Oriente Medio, lo cual podría derivar en consecuencias en el territorio nacional.
Entre las posibles víctimas se incluyen personas o instituciones identificadas con el judaísmo, el sionismo o el gobierno de EE. UU., ya sea por sus funciones, vínculos militares o posicionamientos públicos.
¿Qué se recomienda a la ciudadanía?
El DHS hace un llamado a la vigilancia ciudadana y al uso de canales oficiales para reportar cualquier comportamiento sospechoso o amenazas online. Además, recuerda que su agencia CISA (Agencia de Ciberseguridad e Infraestructura) ofrece recomendaciones actualizadas para mejorar la protección de redes e infraestructuras tecnológicas.
- Emergencias: Llamar al 911.
- Informes de actividad sospechosa: Contactar con oficinas del FBI, centros de fusión locales o el programa If You See Something, Say Something®.
- Seguridad digital: Consultar guías prácticas en el portal de CISA.
El entorno de seguridad en Estados Unidos se ha visto alterado por el recrudecimiento del conflicto en Oriente Medio. Aunque no se han producido grandes incidentes recientes, el DHS alerta que la amenaza es real y multidimensional, especialmente en el ámbito cibernético y en posibles acciones de extremismo violento doméstico.
La ciudadanía y las organizaciones públicas y privadas están llamadas a reforzar sus medidas de ciberseguridad y colaborar con las autoridades en la detección temprana de cualquier indicio de amenaza.