Día a día, los eventos relacionados con robo de identidad y ciberdelito aparecen de forma directa en los medios. Estados Unidos es uno de los países que más sufre esta nueva modalidad de robo de identidad para utilizar los datos en operaciones fraudulentas, y nada parece indicar que vaya a desaparecer en el corto plazo.
Dentro del mundo de Internet, los datos personales de los usuarios son un bien muy preciado. Existen grupos de hackers dedicados específicamente a la venta de datos, para que después otros hackers realizan maniobras fraudulentas o para que empresas cuenten con información personal de los usuarios que sirva para determinar sus costumbres de consumo y comportamiento.
Para proteger mejor los datos sensibles, los bancos y organismos gubernamentales que trabajan con datos personales de los usuarios, están comenzando a utilizar numerosas barreras y medidas de seguridad. De esta forma, nuestro acceso a la cuenta de Home Banking, por ejemplo, requiere de más de una contraseña, y además se actualiza de forma automática una vez por mes.
¿Qué podemos hacer nosotros desde nuestras casas para mejorar la seguridad informática y evitar el robo de identidad? Lo primero que hay que hacer es mantener limpios de información sensible nuestros dispositivos. Móviles, tablets y computadoras, todo lo que se conecta a Internet debe estar limpio, asegurarnos que las contraseñas no se guardan y que un hacker con acceso remoto no pueda acceder a ellas fácilmente, al menos desde nuestra PC.
Es importante utilizar datos sinceros y completos, para que un hacker no pueda crear una cuenta falsa con nuestro nombre e información, en caso de que decida hacer un robo de identidad. La seguridad informática no es un tema sencillo, lleva tiempo y todavía presenta numerosas fallas, pero es probable que se noten mejoras cuando las costumbres de los usuarios sean más seguras.